martes, 26 de agosto de 2008
Lavanda en la banqueta
Cientos de pequeñas matas de lavanda plantadas ahí, te trajeron a mi mente. Sé que ese no es tu olor, que no pasa de ser un cliché bastante gastado, pero aun así me hicieron recordarte; y eso, mi querido amigo, ha sido un gran regalo esta mañana en la que todo parece doler.
lunes, 25 de agosto de 2008
Con rostro de piedra
Una vez más sentí tu presencia con rostro de piedra venir a decirme que pronto tocarías la puerta para cumplir tu cometido.
Lágrimas y sollozos dejaste a tu paso. Dolientes que no pueden entender que tu misión lejos de ser una maldición, es una bendición para quien te llevas contigo.
Te he visto pasar una y mil veces. Sé que siempre estás cerca, sé que puedes llevarte a quien menos esperamos y me pregunto si cuando te lleves a mis amados, podré alegrarme por ellos y hacer a un lado la pena que dejará su vacío en mi vida.
Hasta la próxima...
Lágrimas y sollozos dejaste a tu paso. Dolientes que no pueden entender que tu misión lejos de ser una maldición, es una bendición para quien te llevas contigo.
Te he visto pasar una y mil veces. Sé que siempre estás cerca, sé que puedes llevarte a quien menos esperamos y me pregunto si cuando te lleves a mis amados, podré alegrarme por ellos y hacer a un lado la pena que dejará su vacío en mi vida.
Hasta la próxima...
martes, 19 de agosto de 2008
¡Feliz cumpleaños!
Cuando te conocí tenías veintidós. Han pasado quince desde entonces, con todos los contenidos del mundo, con buenas y malas y altas y bajas y locales y extranjeras, sin los hijos primeros y con ellos después; con menos pelo y más experiencia, con más arrugas y menos dudas.
Muchas cosas han cambiado desde que tenías veintidós, pero muchas otras permanecen: lo mucho que te quiero, lo mucho que me gusta recargar mi cabeza en tu pecho antes de dormir, lo que adoro que tu barba de tres días me pique cuando me besas, lo que disfruto recorrer el mundo a tu lado.
Hoy cumples treinta y siete, y es grandioso ver que parte de nuestro sueño se ha cumplido, que seguimos envejeciendo juntos... que seguiremos.
¡Feliz cumpleaños, corazón! ¡Te amo!
Muchas cosas han cambiado desde que tenías veintidós, pero muchas otras permanecen: lo mucho que te quiero, lo mucho que me gusta recargar mi cabeza en tu pecho antes de dormir, lo que adoro que tu barba de tres días me pique cuando me besas, lo que disfruto recorrer el mundo a tu lado.
Hoy cumples treinta y siete, y es grandioso ver que parte de nuestro sueño se ha cumplido, que seguimos envejeciendo juntos... que seguiremos.
¡Feliz cumpleaños, corazón! ¡Te amo!
miércoles, 13 de agosto de 2008
Vivir con miedo
Es tan intenso lo que tengo dentro que no encuentro las palabras adecuadas para expresarlo en su justa dimensión, porque cuando el miedo, la impotencia, la rabia y la vergüenza se mezclan, no es sencillo describirlo. El miedo a que suceda de nuevo con peores consecuencias; la impotencia de saber que los delincuentes caminan por la calle como amos y señores; la rabia cuando mis hijos le piden a Dios en su oración de la noche que nos cuide de los rateros, cuando le suplican que ya no sean tan malos y dejen de asaltar a la gente de bien; la vergüenza de vivir en un país incapaz de superar el mínimo de sus retos, en una sociedad en la que se premia la ineptitud y la transa, con unos gobernantes que no hacen más que buscar su beneficio mezquino, su pedacito de poder. Vergüenza, rabia y miedo mezclados en las primeras planas de los periódicos que anuncian la muerte de un jovencito a manos de sus secuestradores. ¡¿Quién diablos me asegura que mis hijos o los de mi vecino o los de mis amigos no serán los siguientes?! ¡¿Quién me puede garantizar que la próxima vez que encañonen a mi marido o a mí delante de los ojos de mis pequeños incrédulos y aterrados, no jalarán del gatillo por unos cuantos pesos?! ¡¿Quién me regala un poco de la esperanza necesaria para creer que vale la pena hincharse de orgullo cuando suena nuestro Himno Nacional o se iza nuestra bandera y entre sus notas y bajo sus sombra se cobijan los malditos delincuentes y los políticos pendejos?! ¡¿Qué hay que hacer?! ¿Hay que marchar vestidos de blanco cada día, como hormigas en la selva de la delincuencia para que los que nos deben preservar la seguridad hagan su trabajo? Qué alguien me diga por favor cómo le hago para que mis hijos no tengan que vivir con miedo.
jueves, 7 de agosto de 2008
¿Dónde diablos está la inspiración?
Ya sé que a veces llega a borbotones y que no sabes dónde ponerla para que no estorbe, para que te deje realizar en paz las labores cotidianas, hasta que llega el momento de escribir lo que te dicta con ansia. Sé también que, otras, te abandona como si estuvieras apestado y que por más que intentas atraerla con una copa de vino y buena música a media luz, te patea el culo y se aleja más para reírse de ti antes de salir dando un portazo. Ni siquiera mi nuevo cd de adagios para arpa ha surtido efecto.
Supongo que todo es cuestión de ciclos, o tal vez no y simplemente deba aceptar que ese talento que alguna vez creí tener no era más que una quimera.
A saber...
Supongo que todo es cuestión de ciclos, o tal vez no y simplemente deba aceptar que ese talento que alguna vez creí tener no era más que una quimera.
A saber...
¡Gracias!
Hoy caerá el telón para siempre, ese mismo que hace dieciocho meses se levantó poco a poco para regalarme las notas de los recuerdos; y qué decir de la energía y el virtuosismo musical, mezclados en un ir y venir de canciones que, en algún punto de la vida, se convirtieron en mi casa.
Es curioso. Durante veinte años supuse que nunca los vería juntos en un escenario, afortunadamente el "nunca" se convirtió en ese "siempre" que será el tiempo que llevaré en mi sangre el éxtasis de aquel veinticuatro de noviembre del 2007.
Hoy se me llena el corazón de nostalgia porque ya no se escuchará "Every breath you take" en ningún escenario del mundo interpretado por sus creadores; porque ya nunca más sonarán las notas de "Roxanne" con su Cyrano incluido; porque sus voces se quedarán dentro de mi cabeza, como ecos lejanos de cosas que dijeron aquella noche.
Y bueno... hoy sólo queda el corazón encogido por lo que fue y no volverá a ser. ¡Ah! Y la gratitud, también.
¡Gracias Sting! ¡Gracias Andy! ¡Gracias Stewart!
Es curioso. Durante veinte años supuse que nunca los vería juntos en un escenario, afortunadamente el "nunca" se convirtió en ese "siempre" que será el tiempo que llevaré en mi sangre el éxtasis de aquel veinticuatro de noviembre del 2007.
Hoy se me llena el corazón de nostalgia porque ya no se escuchará "Every breath you take" en ningún escenario del mundo interpretado por sus creadores; porque ya nunca más sonarán las notas de "Roxanne" con su Cyrano incluido; porque sus voces se quedarán dentro de mi cabeza, como ecos lejanos de cosas que dijeron aquella noche.
Y bueno... hoy sólo queda el corazón encogido por lo que fue y no volverá a ser. ¡Ah! Y la gratitud, también.
¡Gracias Sting! ¡Gracias Andy! ¡Gracias Stewart!
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