jueves, 11 de marzo de 2010

When we dance

Una carretera serpenteante, oscuridad, clandestinidad. Huíamos de tu vida, de tus espacios, de tu mujer. Escucha esto, me dijiste, y pusiste play en el discman conectado a la casetera de tu auto, el último recurso tecnológico del momento. Las notas emergieron y tú buscaste mis ojos porque sabías que la humedad se les había colado en la segunda corchea.
Fue inevitable. La rola me cautivó por su belleza propia y también, quizá, porque decía lo que, también quizá, yo quería gritarte:

She won't love you like I love you, she won't care for you this way, she´ll mistreat you if you stay...




Las vueltas de la vida me pusieron del otro lado en otro tiempo y con otra persona.
La canción me regaló una pequeña revancha.

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