lunes, 11 de mayo de 2009

¡Madres!

Ayer fue Día de las Madres. Me fue bien: cariño, abrazos, mañanitas, regalos, familia reunida. Sin embargo este día tuvo su "realmente momento" y es lo que quiero compartir.
Recibí dos cartas.
La de mi hijo de nueve años es colorida, con un gran dibujo en el que me representa sonriente, llena de "te quieros" y de "eres la mejor mami del mundo"; suficiente para que las compuertas de mis ojos se abrieran y dieran paso a un torrente de lágrimas.
La de mi hija de once fue diferente: letra sobria, sin dibujos y con una claridad de ideas que demuestra su evolución. Mi niña no lo es más. Mi niña se convierte en una mujercita inteligente, que sabe cómo expresar sus ideas y sentimientos con palabras hermosas y cuidadas.
No puedo comparar con nada lo que sentí al leer lo que mis hijos llevan dentro por mí, por esta madre que les tocó, mujer complicada y llorona que a veces siente que no encuentra su lugar en el mundo, tontamente, estupidamente, porque su lugar está justo en donde está parada, en medio de sus hijos y el amante compañero que la vida le regaló.
Nunca antes un Día de las Madres tuvo tanto significado para mí.

2 comentarios:

Pustulio dijo...

Felicidades por el dia de la madres ha de ser rebonito recibir cartas de tus hijos jejejeje

Saludos te invitamos a escuchar Buen tono 23
el podcasT!

Anabell dijo...

¡Muchas felicidades por este día amiga!

Definitivamente estas son cosas que hay que atesorar en el corazón.

Te mando un abrazo apretado con mucho cariño.

Besos.